sábado, 20 de junio de 2020

A 200 años de tu paso al O.:E.: y a la Inmortalidad


2 comentarios:

  1. Por éste hecho, el error se conserva en la memoria junto a un bastón de adaptación hasta la liberación de la virtud reprimida.

    La energía anímica que retroalimenta los circuitos, se asimiló y extrapoló simbólicamente en el dinero, como un instrumento y símbolo de poder asociado al instinto de supervivencia, en donde aplica la lucha, la parálisis y la huida.

    Las innumerables variantes "cuánticas" en cada circuito son anecdóticas, y pasan a sumar el saco de las estadísticas. En éste sentido, la lógica booleana asume con toda la responsabilidad de la pesada incertidumbre que muchos llaman destino.

    El misterio del truco de magia se resuelve al descubrirse que el ordenamiento y diseño básico natural se realiza binariamente en planos de dos dimensiones afectados a la mecánica clásica con la que se sincroniza el mapa con el territorio, lo trascendente con lo temporal, el sueño con la vigilia.
    Hasta para interpretar la realidad se necesitan 3 planos con 3 ejes bidireccionales con los cuales se puede invertir la dirección o revertir el sentido desintegrativo hacia el integrativo, sea el caso de estar influenciados por la magia negra, lo diabólico, el satanismo. ¡Bu!
    Aquí el comediante Albert Einstein dió en el clavo al asegurar que el engaño desaparece cuando su masa es cero y se ha detenido.

    Ésta forma básica y natural de ordenamiento es lo extrapolado a los planos de un ordenador global para convertir la materia en un símbolo binario y conjurar un control total sobre las propiedades del imperio, incluídos los pueblos, objetos de un inventario.
    Hermoso cuento y circuito cerrado de hadas icariano. Básicamente se estratifica el formato mental de un super psicópata virtual, sin rostro, nadie y todos, el Dios que han construido para perpetuar el engaño.

    Pero, por más que el amo se beneficie del producto de las virtudes y los defectos de sus rebaños, se convierte inevitablemente en un esclavo más, al estar obligado a sostener la consciencia ideal, interfiriendo en su verdadero desarrollo evolutivo.

    Estar sujeto a tu propio instrumento de manera pasiva requiere entregar ilusoriamente la responsabilidad de las acciones hacia el artefacto virtual y fisico, y con ello velar lo trascedente y esencial, cuestión verificada en las experiencias ordinarias y extraordinarias, frutos del olvido.

    Una vez transformada la verdad en símbolo, es muy fácil su manipulación y arrastre de los socios del club. Por éste hecho, los protocolos, guiones o programas, habilitan la repetición de actos fallidos que obligan a una adaptación de las aberraciones que desarmonizan el orden psicológico y social.

    Es decir, si te sumerges en el cuento de Caperucita roja inconscientemente, no irás a dónde quieras, sino a dónde está programado ir y por el escritor, dirigido.

    Desafortunamente para algunos, la verdad no puede atraparse entre cuatro paredes o dentro de un diamante, siempre sale a luz a pesar de las creencias, maravillosas o aberrantes, que se interponen accionando la parálisis, la lucha y la huida.

    El creyente tecnológico cree que la evolución de la consciencia es determinada por la sofisticación de su bastón o muleta sin realizar esfuerzo alguno por desarrollarse, desdoblándose así de su propia naturaleza y convirtiendo lo esencial en insignificante.
    Afortunadamente para todos, lo que verdaderamente muere son las apariencias, y con ella nos despedimos de la estupidez, la esclavitud y la tiranía.

    Y que descansen en paz, para siempre...

    ¿Quién fue primero, el engañador o el engañado?

    Y colorín colorado, éste cuento se ha acabado.

    ResponderEliminar